02/06/2011 LURDES MUÑOZ. El periódico de Aragón
EDICIÓN IMPRESA EN PDF
En medio de la oscuridad de la noche, la Basílica del Pilar abre sus puertas para dar la oportunidad de descubrir algunos de sus secretos más ocultos. Así, dos grupos de sesenta privilegiados pudieron realizar, las noches del martes y el miércoles, una visita guiada por el templo protagonizada por la empresa Gozarte.
La iniciativa corrió a cargo de Telefónica, que a través de su página web sorteó las 120 entradas entre los 12.000 clientes inscritos. Juan Luis Riesgo, gerente de patrocinio de Telefónica, explicó que la actividad surgió como método para acercar la cultura a sus clientes pero de un modo diferente y exclusivo: “Queremos generar emociones y creo que lo conseguimos”.
Y así, en la intimidad de la noche, los afortunados se adentraron en el Pilar preparados para iniciar el particular viaje. El apóstol Santiago es el encargado de dar la bienvenida al grupo y transportarlos hasta la aparición de la Virgen del año 40. Y entre historias y detalles descubrió los distintos elementos, como su imagen en piedra junto a los siete primeros conversos, o los ángeles que acompañan la imagen de la Virgen, regalo de Felipe II.
La siguiente parada es la Sacristía Mayor. Un lugar desconocido para la gran mayoría, que contiene las pinturas del primer claustro. Frente a ella, el retablo del altar se convierte en el gran protagonista. Una obra de alabastro del escultor Damián Forment, del siglo XVI, donde se reflejan imágenes conocidas como la presentación de Jesús en el templo, y otras que han pasado más desapercibidas como es el caso de la escultura del propio Damián Forment y su esposa Jerónima Alboreda. Esta última, enfundada en un traje del siglo XVI, se acercó al grupo para desvelar los pormenores de tan grandiosa obra. Pero el gran momento de la noche sucede en el coro, donde durante casi 10 minutos y en total oscuridad, el órgano suena para los asistentes. Un momento único para conectar con la música sacra de un modo totalmente exclusivo.
Personajes
La visita no olvida algunos de los milagros que se le atribuyen a la Virgen del Pilar. Así, el paseo llega hasta 1640 en la localidad de Calanda. El propio Miguel Pellicer, más conocido como El cojo de Calanda, aparece bajo su pintura para explicar los detalles de su misteriosa pierna. Pero el recorrido continúa y no podía faltar uno de los aragoneses más ilustres: Francisco Goya. El pintor se acerca a cada visitante y detalla la razón de las polémicas figuras de su obra. Con las campanadas de media noche la visita llega a su fin, aunque no sin antes entonar una bonita jota ante los pies de la Virgen del Pilar.
Calle San Agustín 27-29, 50002 Zaragoza
Teléfono 976 20 73 63
Aviso Legal | Condiciones Generales | Política de Privacidad | Política de Cookies
Copyright © 2018 Gozarte | Todos los Derechos Reservados | Desarrollo web analiZe