Oporto riega en vino rojo sus laderas,
de flores rojas va cubierto el litoral.
Verde es el Tajo, verdes son sus dos riberas
los dos colores de la enseña nacional.
Así cantaba Celia Gámez en la célebre “Estudiantina portuguesa” (tan popular que se cantó incluso en la revolución de los claveles), y continuaba preguntándose:
“¿Por qué tu tierra toda es un encanto?
¿Por qué, por qué, se maravilla quien te ve?
Ay, Portugal, ¿por qué te quiero tanto?
¿Por qué, por qué, te envidian todos, ay por qué?
O por decirlo de una forma más sencilla, MENOS MAL QUE NOS QUEDA PORTUGAL, como reza el viejo dicho. Nuestros vecinos más cercanos y durante mucho tiempo los más desconocidos por los españoles están siempre encantados de mostrarnos su maravilloso país, y aunque parezca un tópico son agradables y encantadores como en muy pocos sitios. ¡¡¡Ir a Portugal es siempre un placer!!! Los paisajes, la comida, el patrimonio… y los portugueses, por supuesto.
Esta vez nos vamos al norte, a descubrir una ciudad increíble y con una personalidad arrolladora: Oporto. Si no la conocéis os va a sorprender de verdad, pero si estuvisteis hace años aún os sorprenderá más, porque el cambio es extraordinario. Oporto, Porto, como dicen ellos, está espectacular, es pura vida, se ha renovado completamente, está llena de tiendas de vanguardia y de patrimonio de siglos… en fin, una gozada. Y no solo Oporto, sino también Coimbra, donde está la universidad más antigua de Portugal y el cuerpo de Santa Isabel (la infanta aragonesa que se casó con el rey portugués don Dinis), Aveiro con sus canales, Guimaraes (“onde nasceu Portugal”, la cuna del país), Braga con el espectacular santuario del Bom Jesus do Monte… y las riberas del Duero, llenas de viñedos que crean un paisaje único y maravilloso.
Sábado 21
Saldremos del paseo de María Agustín (a la altura del IAACC Pablo Serrano) a las 6’00 para dirigirnos a Madrid, donde tomaremos el vuelo a las 11’35 para llegar a las 11’50 (en Portugal es una hora menos). Del aeropuerto nos iremos directamente a Guimaraes, donde nos instalaremos en el hotel Guimaraes (4 estrellas).
Guimaraes es una pequeña ciudad que tiene un valor simbólico enorme para Portugal, pues está en el origen de la nación. El rey Alfonso VI de León y Castilla entregó a su hija Teresa y su marido Enrique el condado de Portucale, cuya capital estaba en Guimaraes. Ellos (y especialmente ella, después de quedar viuda) lucharon por un condado independiente, y sería su hijo Afonso Henriques el que se convirtiera en primer rey de Portugal.
Comeremos (incluido) y después visitaremos el castillo y, justo al lado, el palacio de los duques de Braganza.
El curioso aspecto del palacio recuerda a construcciones de la Borgoña francesa que el primer duque (que lo contruyó para su amante) había visto en sus viajes. Lo que vemos hoy es el resultado de una restauración impulsada por Salazar, que lo convirtió en una de las residencias del presidente del gobierno.
Al acabar daremos un paseo, y después tiempo libre.
Domingo 22
Hoy vamos a pasar la mañana en Braga, una ciudad barroca que tradicionalmente se ha considerado la capital religiosa de Portugal. Comenzaremos nada más y nada menos que por el santuario do Bom Jesus do Monte, con sus espectaculares escaleras que salvan un desnivel de 116 metros (no os asustéis, porque quien quiera podrá subir y bajar en funicular, pero realmente merece la pena por lo menos bajarlas e ir descubriendo las diferentes perspectivas, las capillas con grupos escultóricos en el interior…).
Después nos iremos a la ciudad, donde daremos un paseo por su calle principal y, entre otras cosas, veremos su catedral, con el imponente conjunto del coro barroco, con los magníficos órganos enfrentados, las pinturas del techo…
Nos iremos después a Viana do Castelo, donde comenzaremos en el monte de Santa Lucía. Allí comeremos (incluido), y veremos el templo del Sagrado Corazón, de finales del siglo XIX, disfrutando de las espectaculares vistas.
Desde siempre Viana do Castelo ha tenido una estrecha relación con el mar, que le llevó a tener un papel protagonista en los descubrimientos portugueses y a que muchos de sus habitantes se dedicasen durante siglos a la construcción naval y a la pesca del bacalao en las aguas de Terranova.
Haremos un recorrido por esta ciudad monumental, llena de palacios, chafarices (el nombre que en Portugal se da a las fuentes públicas), iglesias y también obras de algunos de los arquitectos contemporáneos portugueses más importantes, y al acabar volveremos a Guimaraes. Tiempo libre.
Lunes 23
Por la mañana temprano nos dirigiremos a Oporto, donde nos instalaremos en el Grande Hotel do Porto (3 estrellas), excelentemente ubicado en pleno centro de la ciudad. Dedicaremos la mañana a recorrer la zona, viendo el espectacular exterior de la capilla de las almas, completamente recubierto de azulejos, el mercado de Bolhao, un obrador de los deliciosos pasteis de nata (que probaremos), la rua Santa Caterina (que es donde está el hotel), deteniéndonos un momento en el histórico café Majestic, y desde allí bajaremos por la rua das Flores.
Nos dirigiremos después al magnífico edificio de la Bolsa, donde comeremos. Allí podremos conocer el esplendor que tuvo en el siglo XIX aquella ciudad que giraba alrededor de un vino que se exportaba a medio mundo.
Después de visitarlo nos iremos a un lugar completamente distinto, la iglesia de San Francisco (probablemente el interior de talla dorada más impresionante de Portugal).
Al acabar, tiempo libre.
Martes 24
Hoy continuaremos descubriendo algunos de los secretos de Oporto, comenzando por la Sé, la catedral, que como todas las del norte de Portugal tiene un aspecto macizo, casi de fortaleza románica, pero esconde algunas sorpresas en su interior.
Nos dirigiremos después a la Estación de Sao Bento, maravillosamente decorada con azulejos, el arte nacional de Portugal.
De allí pasaremos, cambiando de colina, a la Torre de los clérigos (la torre más elevada de Oporto) y acercándonos a la librería Lello&Irmaos (solo exterior, es posible entrar en la tarde libre) y a la iglesia del Carmen, con su maravillosa fachada de Azulejos.
Acabaremos el día en la Ribeira del Duero, tomando uno de esos barcos que transportaban barricas de vino para hacer el Crucero de los seis puentes. Después, tiempo libre.
Miércoles 25
Aveiro es una pequeña ciudad llena de encanto cercana a Coimbra. Está situada en una ría y esa relación con el mar ha sido siempre la base de su economía: las salinas, la pesca y el comercio marítimo.
Empezaremos el día visitando una joya de la arquitectura industrial, la fábrica de porcelana de Vista Alegre, cuyas exquisitas producciones son conocidas en todo el mundo. Dedicaremos la mañana a conocer la fábrica, el museo y la iglesia, y después nos iremos a descubrir por qué Aveiro es conocida como la Venecia de Portugal, pues está surcada por numerosos canales por los que van unas barcas muy especiales, que llaman “moliceiros“. Montaremos en ellas y después nos acercaremos a Playa de Costa Nova, con sus curiosas “casas pijama”.
Comeremos (incluido) un típico arroz portugués de pescado, y después volveremos a Oporto, donde tendremos el resto de la tarde libre.
Jueves 26
Coimbra se levanta a la orilla del río Mondego, el río más largo que recorre solo tierras portuguesas (todos los demás ríos importantes nacen en España). Durante mucho tiempo fue capital de Portugal y estuvo muy vinculada a la primera dinastía que dirigió los destinos del reino, y por esa razón don Dinís fundó aquí la primera universidad del país, que sigue siendo la institución académica más antigua del mundo en lengua portuguesa (un idioma que tiene casi 300 millones de hablantes).
Aunque Coimbra ya existía en época romana, sería a partir de la Reconquista cuando se convirtiera en la ciudad más importante al sur del Duero, y sería la capital de Portugal hasta que en 1255 pasó a serlo Lisboa. Afonso Henriques, el primer rey portugués, impulsó la construcción de la catedral románica y del monasterio de Santa Cruz (el más importante de Portugal en aquel tiempo), reconstruyó el puente romano…
Nosotros comenzaremos nuestro recorrido por la Universidad, en la que veremos los edificios históricos que se conservan (especialmente la biblioteca Joanina, llamada así por haber sido construida en época de Joao V, en el siglo XVIII), y también conoceremos las peculiares costumbres de la vida universitaria.
Bajaremos después hasta la Sé velha, la catedral vieja, un potente edificio románico cuya construcción comenzó después de la victoria de Ourique, a raíz de la cual Afonso Henriques se proclamó rey de Portugal. Vista desde el exterior parece completamente una fortaleza, aunque se abren en ella algunas puertas monumentales. Dentro conserva importantes obras de arte, como su magnífico retablo mayor. el mejor de los retablos flamencos de Portugal.
Acabaremos la mañana en el Monasterio de Santa Cruz, una de las grandes joyas históricas y artísticas del país. Aquí se conservan las tumbas de los primeros reyes, auténticas filigranas de piedra hechas en el Renacimiento por un escultor del norte de Europa que dejó su obra por todo el centro de Portugal, Nicolau de Chanterenne. En cualquier caso el monasterio es mucho más, y descubriremos espacios tan singulares como un relicario absolutamente especial.
Después de comer (libre) nos iremos al Monasterio de Santa Clara-a-Nova. Hubo otro dedicado también a Santa Clara, pero como estaba a la orilla del río y se inundaba frecuentemente decidieron hacer uno nuevo en un punto más elevado, trasladando entonces los restos de Santa Isabel, “a rainha santa”, nacida en Zaragoza y uno de los personajes más importantes de la historia de Portugal. Al acabar, regreso a Oporto y tiempo libre.
Viernes 27
La base fundamental de la riqueza de Oporto es todo lo que tiene que ver con el vino, aunque los viñedos se encuentran aguas arriba, a una distancia considerable de la ciudad. Hoy nos vamos a ir a conocer esa zona, que se conoce como el Douro vinhateiro, caracterizada por un paisaje único, con los viñedos plantados en las laderas, desde el río a la parte más alta, aprovechando cualquier espacio.
Acompañados por un verdadero especialista que nos descubrirá todos los secretos del vino de Oporto visitaremos una bodega por la mañana en la que conoceremos qué hace al vino de Oporto tan diferente.
Después comeremos en un restaurante muy especial, considerado por los viajeros como uno de los mejores de Portugal (DOC, del chef Rui Silva, que es toda una institución en el país vecino). Allí comeremos literalmente sobre el Duero, con el río a nuestros pies y las laderas de enfrente llenas de viñedos. Por la tarde cogeremos un barco para ver el maravilloso paisaje de los viñedos desde el río y volveremos a Oporto después de haber degustado abundamente los maravillosos vinos que se producen aquí, que no se parecen a los de ningún otro sitio. Vuelta a Oporto y tiempo libre.
Sábado 28
Hacia las 9’30 nos iremos al aeropuerto, donde tomaremos el vuelo a las 12’30. Llegaremos a Madrid a las 14’45 y allí nos esperará nuestro autobús para llevarnos a Zaragoza, donde llegaremos hacia las 18’30.
Este es el plan. Seguramente habéis pensado que me repito, que todo es maravilloso, espectacular, increíble, paradisíaco… pero es que se me acaban los adjetivos para describir estos lugares tan extraordinarios.
PRECIO – 1.745 € por persona en habitación doble (suplemento habitación individual, 375 €)
El precio incluye:
Forma de reserva
La agencia de viajes es:
VIAJES VIMAR S.A.
AUTOVIA DE LOGROÑO, KM. 2,400
POLIGONO EL PORTAZGO 66
50011 – ZARAGOZA
Título: C.A.A.: 3MM
GOZARTOURS
C/ San Agustín, 27-29, 2º B
50002, Zaragoza
Título: C.A.A. 325
Calle San Agustín 27-29, 50002 Zaragoza
Teléfono 976 20 73 63
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