A finales del siglo XIX y principios del XX gran parte de Europa se llenó de construcciones llenas de fantasía, formas nuevas y distintas de todo lo que se había visto antes. Fachadas llenas de color, asimétricas, piezas de artesanía deslumbrantes y originales… Pero lo que hacía singular a aquel arte es que era ¡¡¡MODERNO!!! Miraba al futuro, no al pasado, y por eso se le llamó Art Nouveau, o Modernismo. Todo era rabiosamente moderno, la palabra fetiche de la época: el Café Moderno, el Cine Moderno, el Hogar Moderno, los tranvías, los cines, la luz eléctrica, los cabarés… ¡¡¡Todo!!! Y también las Exposiciones Universales, como la que se celebró en Barcelona en 1888 y que eran un poco como las fiestas mayores del mundo entero.
Barcelona fue una de las capitales del Modernismo, que allí tuvo un aire muy, muy especial. Con la Exposición Universal la ciudad era un hervidero de gentes que llegaban de todas partes, y allí se juntaron clientes que se podían permitir grandes proyectos (aquella burguesía que había impulsado la industrialización, se había enriquecido y tenía ganas de diferenciarse) y arquitectos que se habían formado en una ciudad que se había modernizado con un Ensanche modélico. No podremos conocer, ni mucho menos, todas las construcciones modernistas en la ciudad, pero podremos ver las principales, declaradas por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad, tanto las realizadas por Lluis Domenech y Montaner como las de Antonio Gaudí.
Pero hay más, pues en aquellos años del fin de siglo vivían en la ciudad muchos otros artistas que iban y venían a París, que se había convertido en la capital cultural del mundo: como Ramón Casas, Santiago Rusiñol, pronto Pablo Gargallo… y sobre todo uno. En 1895 llegó a Barcelona un chaval de 14 años que estaba decidido a cambiar por completo el mundo del arte: se llamaba Pablo Picasso y había nacido en Málaga, pero pronto se iba a integrar perfectamente en aquella ciudad.
Aprovechando que el mundo entero se dispone a celebrar el 50 aniversario de la muerte de Picasso, recorreremos algunos de los espacios relacionados con él, como “Els Quatre gats”o el magnífico Museo Picasso, instalado en varios palacio góticos de la calle Montcada.
¿Os venís?
SÁBADO 11 DE FEBRERO
Saldremos de Zaragoza a las 6’30 para estar ya en marcha en Barcelona hacia las 11’00. Hoy pasaremos la mañana descubriendo dos magníficos edificios muy diferentes. El primero, el PALAU DE LA MUSICA, una obra maestra de Domènech i Montaner y una verdadera joya del Modernismo europeo que todavía sigue en funcionamiento.
El segundo, una maravilla del gótico, la BASÍLICA DE SANTA MARÍA DEL MAR, a escasos metros de allí. ¿Por qué una obra gótica, si dedicamos el viaje al Modernismo? Porque la influencia del gótico en la obra de Gaudí fue enorme. El arquitecto consideraba al gótico un estilo imperfecto (y aquí veremos por qué), y lo más importante de su obra va a consistir precisamente en eso, en perfeccionarlo, eliminar las “muletas” que necesitaban los arquitectos góticos y que aquí veremos perfectamente.
Comeremos (incluido) y nos iremos al PARQUE GÜELL. El cliente más importante que tuvo Gaudí en su vida (cliente y amigo) fue el industrial Eusebi Güell, que le hizo numerosos encargos a lo largo de su vida. Uno de ellos fue un proyecto de urbanización de lujo que consistía en crear los espacios comunes y vender parcelas en las que los diferentes propietarios edificaran su casa. No funcionó y acabó convirtiéndose en un parque público (los herederos de Güell se lo vendieron al Ayuntamiento) donde podremos ver un maravilloso mundo de fantasía, desde las casitas de la entrada (los edificios de administración, que posiblemente se inspiran en la casa de chocolate de Hansel y Gretel) hasta la famosísima fuente de la escalera que vemos en esta fotografía, con el dragón de trencadís (la técnica de utilizar trozos de cerámica rota para crear la decoración).
Al acabar nos iremos a instalar al hotel Zenit Barcelona (4 estrellas). Después, tiempo libre.
DOMINGO 12 DE FEBRERO
Hoy por la mañana saldremos de Barcelona para ir a Santa Coloma de Cervelló, donde Eusebi Güell creo una la COLONIA GÜELL para obreros de sus fábricas, con viviendas, iglesia, escuela… Un lugar verdaderamente interesante en el que, sobre todo, podemos ver la cripta de la iglesia (nunca se acabó de construir por la muerte de Güell).
Daremos un paseo para conocer algunos de los principales edificios de la colonia y después tendremos una comida típica de estas fechas, una CALÇOTADA en la que se comen calçots (unas pequeñas cebollas) y otros productos a la brasa.
Por la tarde visitaremos una de las obras maestras de Gaudí, la CASA BATLLÓ, que hizo en plena manzana de la discordia del paseo de Gracia para los señores Batlló. En realidad fue una reforma de una casa que ya existía, pero su intervención la transformó por completo hasta el punto de que en su deslumbrante fachada podremos descubrir la lanza de San Jorge, el dragón muerto y los huesos de sus víctimas.
Descubriremos su interior, una pura fantasía (las escaleras, los patios de luces, el piso de los señores Batlló, el tejado…) y después daremos una vuelta por el Paseo de Gracia, el lugar que fue objeto de deseo de muchas familias de aquella burguesía catalana. Veremos la fachada de la casa Amatller, por ejemplo, que está pared con pared, o la de la casa Lleó Morera, que hicieron que a esta zona se le llamara “manzana de la discordia” porque todos querían instalarse aquí.
Nos iremos después a la CASA MILÁ, conocida también como LA PEDRERA, porque su fachada de piedra casi recuerda a una enorme cantera, o tal vez a un fondo marino (la decoración de forja de los balcones puede recordar a raíces, o a algas…).
Al acabar, regreso al hotel y tiempo libre.
LUNES 13 DE FEBRERO
Hoy por la mañana vamos a visitar dos conjuntos únicos y extraordinarios. Comenzaremos con el HOSPITAL DE SANT PAU Y LA SANTA CREU, un impresionante conjunto de edificios de Domènech i Montaner, el autor del palacio de la música.
Y continuaremos con la gran obra de Gaudí, la SAGRADA FAMILIA, cuya construcción continúa a un ritmo que en los últimos años se ha acelerado, hasta el punto de que de no haber sido por la pandemia tenían previsto acabar en 2026, año del centenario de la muerte del arquitecto.
La Sagrada Familia es un edificio apabullante, pero en cuanto empezamos a fijarnos nos damos cuenta de las novedades: arcos y cúpulas de formas extrañas, pilares inclinados… el resumente de las reflexiones de toda una vida. ¿No era el gótico un estilo imperfecto? Pues aquí ha solucionado Gaudí todas esas “imperfecciones”. Las muletas que necesitaban Santa María del Mar y otras construcciones medievales (contrafuertes, arbotantes) ya no hacían falta gracias a las novedades creadas por él.
Después de comer (incluido) acabaremos nuestro viaje en el PARQUE DE LA CIUDADELA, donde tuvo lugar la Exposición Universal de 1888, el acontecimiento que fue el pistoletazo de salida para la explosión de la ciudad. Daremos un paseo para descubrir los diferentes elementos de aquel acontecimiento, como el castillo de los tres dragones, el arco de triunfo… y al acabar volveremos al hotel. Tiempo libre.
MARTES 14 DE FEBRERO
Este último día lo vamos a dedicar a Picasso y sus amigos, los que le hicieron descubrir la bohemia en Barcelona y le mostraron el camino a París, donde se convertiría en el artista más grande del siglo XX. Y comenzaremos, como no podía ser de otra manera, en “Els quatre gats”, restaurante y cafetería fundado por Pere Romeu siguiendo un poco el modelo del famosísimo cabaret parisino “Le chat noir”, donde había trabajado. Aquí se reunían todos aquellos artistas muertos de hambre, y aquí montó Picasso su primera exposición individual.
Continuaremos recorriendo los rincones de aquella Barcelona un tanto sórdida en la que se movía nuestro artista, como la calle Avinyó, donde estaba el burdel que representó en una obra que sería la partida de nacimiento del arte moderno, “Las señoritas de Avinyó”. Sus amigos al verla torcían el gesto sin entender muy bien qué era todo aquello, pero estaba naciendo un mundo nuevo, como podremos comprobar en la visita al Museo Picasso, uno de los más importantes del mundo, absolutamente imprescindible para conocer al Picasso más joven.
En 1960 Jaime Sabartés, amigo y secretario personal de Picasso, propuso su creación al ayuntamiento de Barcelona (Málaga lo había rechazado por aquel entonces). Pronto se llegó a un acuerdo (desobedeciendo al gobierno central, cuyas diferencias con el artista eran bien conocidas), y tres años después se inauguraba con las obras donadas por Sabartés, otras que ya eran propiedad de la ciudad… Al primer edificio (un palacio gótico de la calle Moncada) ser irían uniendo otros (hoy son cinco), y también fueron llegando otras donaciones, como las 58 obras sobre “Las meninas” que dio el propio Picasso.
Después comeremos (incluido) y tendremos algo de tiempo libre, para salir en dirección a Zaragoza hacia las 18’00, llegando hacia las 21’30. Este es el plan. ¿Os animáis? Pues aquí tenéis el resto de la información:
Cuándo – Sábado 11 de febrero a las 6’30
Dónde – Museo Pablo Serrano, Paseo María Agustín, 20
Precio – 850 € por persona, en habitación doble (suplemento habitación individual, 125 euros)
El viaje incluye:
El precio NO incluye:
Forma de reserva
La agencia de viajes es:
GOZARTOURS
C/ San Agustín, 27-29, 2º B
50002, Zaragoza
Título: C.A.A. 325
VIAJES VIMAR S.A.
AUTOVIA DE LOGROÑO, KM. 2,400
POLIGONO EL PORTAZGO 66
50011 – ZARAGOZA
Título: C.A.A.: 3MM
Calle San Agustín 27-29, 50002 Zaragoza
Teléfono 976 20 73 63
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